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Sonidos de Esperanza debutó junto con ensambles del Sistema

El coro de manos Sonidos de Esperanza, integrado por niños, niñas y jóvenes con discapacidad auditiva, presentó su primer concierto,  junto con los coros y orquestas juveniles de Ilobasco, San Salvador, San Vicente y Santa Ana.

Más de 150 jóvenes músicos participaron en el concierto que el Ministerio de Cultura ofreció en el cierre de temporada del Sistema de Coros y Orquestas Juveniles, con el debut del coro de manos Sonido de Esperanza, este 15 de diciembre, en el Teatro Presidente.

La presentación musical estuvo precedida por las palabras de la ministra de Cultura, Mariemm Pleitez,  y de la vicepresidenta de la Asamblea Legislativa, Suecy Callejas.

Ministra de Cultura, Mariemm Pleitez.

“En el Gobierno del presidente Nayib Bukele, como Ministerio de Cultura  tenemos claro que las artes son el camino para la construcción de un mejor El Salvador, porque las artes deben ser de naturaleza inclusiva, deben demostrar con acciones que todos y todas podemos participar de ellas, y que la voz de cada salvadoreño y salvadoreña puede ser escuchada”, expresó la ministra Pleitez.

Por su parte, la diputada Callejas afirmó: “Desde la Asamblea, y desde la Comisión de la Familia, trabajamos para sentar las bases para que estos espacios perduren. Gracias a las familias de los integrantes de este coro. Nuestro compromiso es seguir abriendo espacios y sé que su compromiso es seguir apoyando a sus hijas e hijos”.

El coro Sonidos de Esperanza interactuó junto con los demás ensambles en la interpretación a través de sus manos, con el Lenguaje de Señas Salvadoreño (LESSA), de las obras “Oda a la alegría”, del compositor Ludwig van Beethoven, y “Noche de paz”, de Franz Gruber. Todo bajo la dirección en lenguaje de señas de la maestra Carolina Rodríguez y la dirección orquestal del maestro Walter Ortiz.

En “Noche de paz”, todas las orquestas y coros se unieron a Sonidos de Esperanza para interpretar con lenguaje de señas una estrofa de la canción, lo cual conmovió mucho al público presente, que correspondió alzando las manos y agitándolas para expresar las gracias en LESSA.

“Esta es la primera composición inclusiva en la historia de El Salvador. La música está escrita de modo que utiliza sonidos graves fuertes para que las personas con discapacidad auditiva puedan percibir las vibraciones con mayor fuerza. Además, invita al coro de manos a utilizar instrumentos musicales”, dijo el maestro Ortiz, director del Sistema.

“Dimos un gran espectáculo y me siento bien; estamos muy felices y casi lloro con el coro Sonidos de Esperanza. Me gustaría aprender lenguaje de señas”, expresó el joven Francisco Carpio, violinista de la Filarmónica Juvenil de San Salvador.

En el concierto se tocaron además temas de las películas “Guerra de las galaxias” e  “Indiana Jones y el arca perdida”, así como música de la época, como “Concierto de Navidad”, “Paseo en trineo” y el popurrí sinfónico de villancicos navideños “Una fiesta navideña”, bajo la dirección del maestro Jeffry Newberger.

 “Ha estado muy bonito el concierto. Hay trabajo, hay inclusión con toda la gente que está participando en el coro. Ojalá que se den más seguido para que la gente venga y se dé cuenta que hay mucho talento en los niños”, opinó el señor Manuel Reyes.

Tras el concierto, los integrantes de Sonidos de Esperanza participaron en un convivio en el que el viceministro de Cultura, Eric Doradea, se refirió a un sueño hecho realidad: “El sueño que veníamos construyendo desde hace mucho tiempo”.

Además, dio las gracias a los maestros y maestras, así como a las madres y padres de familia de “estos chicos que cantan con las manos del universo”.

En viceministro Doradea reiteró que el ensamble tendrá todo el apoyo por parte del Ministerio de Cultura para que el número, actualmente de diez integrantes, crezca “como un jardín hermoso que va a dar sus frutos de flores bellas y olores bellos”.

“Ha sido una noche muy especial donde cada uno de nosotros nos llevamos un compromiso: reconocernos que todos somos iguales”, concluyó el funcionario.